El síndrome braquicefálico

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El síndrome braquicefálico

Mensaje por surarmado » Mar Oct 17, 2017 9:06 pm

Un síndrome es definido como un conjunto de signos clínicos que juntos caracterizan una enfermedad o condición anormal. El síndrome braquicefálico, también conocido como “Enfermedad obstructiva congénita de las vías respiratorias superiores”, es un conjunto de anomalías físicas comunes a las razas braquicéfalas.

Estos perros tienen en común que presentan el cráneo y en particular la cara y la nariz acortadas. “Braqui” significa “corto” y “céfalo” significa “cabeza”. Al ser la cara y huesos de la nariz más cortos, la anatomía de los tejidos blandos se ve obligada a cambiar ya que el espacio es limitado. Los animales que son braquicéfalos tienen la cara chata y muchas veces tienen el diámetro de los orificios nasales reducidos.

Algunos ejemplos de razas braquicéfalas son el Bulldog Inglés, Bulldog Francés, Pekinés, Bóxer, Carlino, Shar Pei, Shih Tzu y Boston Terrier. También hay felinos con este tipo de cráneo, como son los gatos persas.

Las anomalías presentes pueden ser:

•Estenosis de narinas: es un severo estrechamiento de los orificios nasales.

•Paladar blando elongado: el paladar blando se extiende hacia la parte posterior de la garganta y puede bloquear las vías respiratorias.

•Eversión de los sáculos laríngeos: Con el aumento del esfuerzo respiratorio, debido a las narinas estenóticas y al paladar blando alargado, estos sáculos son arrastrados hacia las vías respiratorias lo que restringe aún más el flujo de aire.

•Reducción del diámetro de la tráquea: la tráquea tiene un diámetro reducido en relación a otras razas.

Los animales con síndrome braquicefálico, con el tiempo, pueden desarrollar otras anomalías en las vías respiratorias que incluyen: - Inflamación e hinchazón de la laringe (laringitis) y faringe (faringitis). - Eversión de las amígdalas (las amígdalas sobresalen en la garganta). - Colapso de la epiglotis (parte de la laringe), laringe y/o tráquea.

Como consecuencia estos animales sufren de una gran variedad de signos clínicos entre los cuales encontramos: dificultad respiratoria, ronquidos constantes o intermitentes, intolerancia al ejercicio, reflujo, tos, estornudos, cianosis, colapso, mayor susceptibilidad a golpe de calor, dificultad para tragar.

Además de tener toda una patología propiamente respiratoria, recientemente se ha asociado a alteraciones gastrointestinales como vómitos, regurgitaciones y/o secreción excesiva de saliva (tialismo).

PATOLOGÍA DEL SÍNDROME

Los perros chatos tienden a sobrecalentarse. La explicación se halla en que la mayor parte del exceso de calor se elimina a través de los pulmones, cualquier alteración respiratoria disminuye la capacidad de eliminación de calor. Sin embargo, el mero hecho de que la respiración sea forzada es capaz de provocar un colapso progresivo de las vías respiratorias, lo que puede disminuir la capacidad respiratoria. En razas con aberturas nasales pequeñas un mínimo esfuerzo para respirar puede cerrarlas. Cuanto más esfuerzo hace el perro para respirar, más se cierra la nariz y más se estrechan las vías respiratorias. Puede ser que el perro tenga las narinas normales, pero el estrechamiento de las cavidades nasales dificulta la circulación del aire. Otro de los problemas ya mencionados está en el paladar blando, el cual está elongado. El exceso de longitud del paladar no solo estorba la circulación del aire, puede que llegue a entrar dentro de la laringe. El resultado será que la circulación irregular del aire provoca inflamación del tejido del paladar y así más obstrucción. El paladar elongado también produce sonidos cuando el perro respira. En conclusión la fisiopatología del síndrome se basa en un orificio nasal estenósico y la prolongación del paladar blando, causando un incremento de la resistencia del flujo del aire, el cual requiere un esfuerzo inspiratorio mayor. Esto genera un aumento de la presión negativa durante cada ciclo respiratorio, el cual lleva a la eversión de los sáculos laríngeos, edema, engrosamiento de la mucosa laríngea y faríngea.

El tratamiento de las anomalías anatómicas generalmente es quirúrgico.

Fuente El Día Revista Domingo
Y aquel que no tenga espada, que venda su manto y compre una. (Lucas 22, 36)
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