Autor: Abedini Javier
Fecha publicación: 09/03/2011
Auspicia: Full Metal
Cuando se realiza un disparo a una relativa distancia con la finalidad de abatir un animal salvaje, muchas veces juega en nuestra contra no solo el espacio que existe entre la boca del cañón del arma de fuego y el objetivo, sino que también se ha de evaluar el calibre y el tipo de munición que estamos usando.
Tomando en cuenta nuestra fauna mayor autóctona, siempre se consideró como un calibre ?top? al .308 Winchester, aunque hoy en día se han introducido especies foráneas ?nuevas? y de gran porte en algunos cotos de caza, que hacen necesario considerar de nuevo el calibre a adoptar.
Calibre .300 Win Mag
Calibre .270 Win
De la misma manera es necesario pensar en las posibilidades de realizar el disparo a mayor distancia, ya que muchas veces las presas se evaden y extienden sus territorios. No son pocas las veces que los animales huyen heridos y mueren después de haber recorrido una gran distancia y muchas veces el factor principal y causante de la muerte es el sangrado.
En algunas zonas del litoral se han introducido especies tales como búfalos de agua, que son pequeños cerebros dentro de un cuerpo de dinosaurio de casi una tonelada, muchas veces con muy mal carácter y con poco aprecio a un hombre con un arma, más aun si esta herido, y peor para nosotros si el arma con la que contamos solo lo ?lastima?. Valga mencionar que en nuestro país el calibre .308 Winchester alcanza para un jabalí, pero en países del norte es muy común la caza de animales de gran porte como un Elk o un grizzli, de similares particularidades a un búfalo en la gama del tipo de caza. Para este tipo de animales siempre se considera un calibre de gran energía tal como por ejemplo un 7 mm Rémington o un .300 Winchester Magnum.
Cartuchos .300 Winchester Magnum
Cartuchos .300 Winchester Magnum
De la misma manera hay que considerar que en disparos a grandes distancias se necesitan trayectorias tensas para compensar la caída del proyectil en su vuelo, es por ello que existen calibres diseñados con tal finalidad tales como por ejemplo un .243 Winchester o un .270 Winchester.
Cartuchos .270 Winchester
Cartuchos .270 Winchester
Haciendo un poco de historia podemos decir que el calibre .270 Winchester, fue diseñado en 1923, pero salio al mercado en 1925 por la propia firma Winchester para un fusil, (rifle para su denominación), de cerrojo denominado como ?Modelo 54?. El calibre parte de la vaina de un Springfield .30-06 con una reducción en el agolletado, para poder montar una bala del calibre .277 milésimas de pulgadas. Una de las mas importantes particularidades y ya previamente explicada, es su trayectoria, la cual es particularmente muy tensa. Se usa mucho en la caza grandes distancias, y de animales de mediano porte.
El calibre 300 Winchester Mágnum, fue diseñado en el año 1963 por la firma norteamericana Winchester. Presenta una vaina mas larga que el Springfield .30-06, y al igual que el .270 Winchester, tiene trayectorias muy tensas y poca desviación ante un viento lateral. Esto lo convierte en un rifle que puede asegurar presas de gran porte a grandes distancias, según entendidos afirman que el mismo tiene un rango de operatividad de un disparo efectivo de unas 1000 yardas, (914,4 metros). Cabe mencionar que algunos grupos especiales de fuerzas especiales, usan rifles en este calibre para sus ?snipers?, valga mencionar en Alemania Bundeswehr G22 y en USA el M86.
Especificaciones técnicas
Comparación entre un cartucho .270 Winchester y un .300 Winchester Magnum
Comparación entre un cartucho .270 Winchester y un .300 Winchester Magnum
¿Que significa interlock?... pues bien, la firma Hornady, produce un anillo o refuerzo, (ring), en la parte inferior del encamisado lado interno, y por debajo de la cintura de engarce, con la finalidad de mantener la masa, y lograr una expansión controlada, para evitar una sobre penetración y una perdida inútil de la energía. El núcleo y el encamisado permanecerán bloqueados durante la expansión. El interlock, (traba interna), conserva uniformemente la masa y energía, y evita la sobre penetración o que se atraviese el blanco acorde. Una vez establecida esta particularidad, comencemos a conocer las particularidades de la cartuchería.
Interlock
Calibre: .270 Winchester
Calibre .300 Winchester Mágnum
Detalles de la punta del cartucho .300 Win Mag
Vista en detalle del Belted de los cartuchos .300 Win Mag
Pruebas balísticas
Para estas operaciones, se usaron dos fusiles de la firma Remington: Fusil calibre .300 Winchester Mágnum, de la firma Remington, modelo 700 CDL, 26 pulgadas de largo de cañón, 1 vuelta en 10 pulgadas. Con una mira Zeiss regulable de 12 aumentos y una salida de 50 mm.
Fusil calibre .270 Winchester, de la firma Remington, modelo 700 BDL, 22 pulgadas de largo de cañón, 1 vuelta en 10 pulgadas. Con una mira Tasco de 12 aumentos con una salida de 50 mm.
Las condiciones climáticas al momento de las pruebas fueron de 34 Cº de temperatura, una humedad de 56 %, y un viento del oeste de 25 km/h.
Los disparos se realizaron con bípode, y bolsines de arena, modalidad cuerpo a tierra, sol ubicado a nuestras espaldas, se usaron blancos colocados sobre las chapas para lograr un disparo más certero, las distancias fueron de 100 metros y luego a 200 metros.
Al respecto de los disparos a 100 metros, tomando en cuenta el calibre, el tipo de munición usada, el instrumental óptico, las condiciones climáticas, y el tipo de arma; la distancia de mención es una nimiedad, de la misma manera podría llegar a serlo en 200 metros, solo que el sitio donde se realizo la prueba de tiro no contaba con mayor distancia.
En principio comencé a probar sus sellamientos estancos, por lo cual comencé una serie de pruebas de tormentos similares a las realizadas a otras municiones. Entre las pruebas de tormento que fueron sometidos estos cartuchos cabe mencionar en primera instancia que se los fue separando de dos en dos.
A dos cartuchos de cada calibre se le aplico temperatura en un medio acuoso a más de 100º Centígrados durante 30 minutos, previo a la realización de disparos. A otros dos cartuchos de cada calibre se los congelo durante siete días. A otros dos de cada calibre se los dejo siete días enterrados en barro. A otros dos de cada calibre se los dejo siete días en una solución de agua con sal durante siete días.
Resultados de su funcionamiento
Pruebas balísticas
Uno de los interrogantes que se me plantearon, es ¿contra que iba a probar esta munición? Si bien por testimonios de legítimos usuarios de éste calibre, me manifestaron que sus niveles de energía y eficacia eran más que suficientes para respaldar su fama y renombre, además no olvidemos y tal cual es explicado mas arriba, son calibres de caza media y de uso militar.
Obviamente en otros países es común que se denoten sus virtudes cinegéticas, mostrando los resultados de una buena caza de un animal de gran porte. Pero tomando en consideración que vivo en Argentina, y que muchos de los grupos anti gun de nuestro país, se regocijarían mostrando esas imágenes, obviamente y tal cual los caracteriza con sus falacias y su proceso de desinformación, jamás tomarán en cuenta conceptos tales como inseguridad, defensa contra animales salvajes, alimento, etc. Por lo cual, ya sabiendo que su diseño de su punta es expansivo, ya que es su finalidad conceptual de su diseño, comencé a probar el arma sobre elementos de una relativa dureza, para observar sus propiedades de penetración, como por ejemplo chapas de hierro, de 4 mm., y de 7 mm., y ladrillones a grandes distancias.
Como primera prueba empecé a realizar los disparos sobre una chapa de hierro de 4 mm de diámetro, a 100 metros, como dato anexo y de gran interés, es importante resaltar que dos de los disparos a 100 metros en el calibre .270 Winchester solo tuvieron un margen de 5 mm., uno de otro, pareciendo casi un solo e único orificio de entrada de forma de un número ?8?. Mientras que a 200 metros las distancias se ampliaron existiendo una diferencia de casi 5 mm., entre un orificio de entrada y el otro.
Los diámetros de los orificios en todos los casos rondan entre los 7,2 mm., y los 7,4 mm., de forma circular, en donde se aprecian bordes evertidos hacia la parte anterior y la parte posterior, esto en virtud de la velocidad propia del calibre. Por otra parte se aprecia algunos vestigios del material constitutivo del proyectil sobre los bordes mencionados.
En el calibre 300 Winchester Mágnum, y de la misma manera que en el .270 Winchester, a 100 metros se produjeron dos orificios con una distancia de aproximadamente 6 mm., mientras que a 200 metros la distancia entre los orificios es de casi 2 centímetros. Los diámetros en todos los casos rondan los 8,4 a 8,8 milímetros, de forma circular, con bordes evertidos hacia la parte anterior y la parte posterior, esto en virtud de la velocidad propia del calibre. Por otra parte se aprecia algunos vestigios del material constitutivo del proyectil sobre los bordes mencionados.
Luego se colocó una chapa de 7 mm., de espesor, colocada a 100 metros, a la cual tampoco le ofreció problema alguno en atravesarla, asimismo se apreciaron los mismos signos que en la chapa de 4 mm., tanto en el calibre .270 Winchester como en el .300 Winchester Magnum.
Luego se colocaron ladrillones en fila, realizando cuatro disparos en distintas oportunidades, logrando a 100 metros el calibre .270 Winchester romper tres ladrillones en todos los casos, asimismo se produjo una particularidad, en uno de los disparos, dado que atravesó limpiamente el primer ladrillo, haciendo estallar el segundo y quebrando al tercero. De la misma manera y con el mismo resultado se evidenciaron los impactos en los ladrillones a 200 metros.
Recién en el tercer disparo con el calibre .270 Winchester a 200 metros, se logró encontrar un fragmento del material constitutivo del proyectil con una importante deformación.
Vista de los restos de un proyectil del calibre .270 Win, disparo a 200 mts sobre ladrillones
En el calibre .300 Winchester Mágnum, a 100 metros en las cuatro oportunidades, logro romper a cuatro de los ladrillones, de la misma manera y con idénticos resultados se dio en los 200 metros. En el último disparo a 200 metros se logró encontrar un fragmento de material constitutivo del proyectil con una importante deformación.
Conclusión final
Dicen que una imagen vale mas que mil palabras, por lo cual creo conveniente solo acotar que es menester tomar en consideración no solo el calibre de las municiones expuestas, sino también la tecnología interlock de la firma Hornady, y que es de considerarse al momento de salir a cazar, mas aún tomando en cuenta que el tipo de punta influirá en los efectos que deseamos obtener, esa combinación de calibre + punta expansiva, hacen que jueguen un rol especial en cuestiones cinegéticas.
No nos olvidemos de los niveles de velocidad y energía que se manejan en estos calibres, que conjugados con las puntas expansivas interlock soft point, lograrían una rápida incapacitación de animales de gran porte.
Espero que el presente informe sea de su agrado y les haya sido de utilidad, los saluda muy atentamente.
Mis agradecimientos a los Señores Marcelo y Fabián, y a los representantes de la firma en Argentina.
Técnico Superior en Balística
Instructor de Tiro RENAR
Copyright Javier Abedini
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