Pesca

Mimoso o Bagre de Mar a la vista

Denominado por la ciencia Tachysurus barbus

Autor: De Victor

Fecha publicación: 13/07/2004

Las aguas del Plata se van templando paulatinamente a medida que los días pasan. Es casi primavera y los primeros piques de Bogas desplazan a las corridas del Pejerrey en la prioridad del pescador.

Lentamente, nutridos cardúmenes de Bagres de mar, recorren grandes distancias en la búsqueda de profundos pozones y canales que a modo de circunstanciales hogares de temporada constituyen un ámbito ideal para la reproducción, dado que como otras especies, son peces marinos de penetración fluvial.

La ruta de migración de estos bagres que provienen del mar, no está aún bien definida. Analizando el contenido estomacal de muchas piezas pescadas al principio de la temporada, se ha podido comprobar que el alimento predigerido hallado en su aparato digestivo, es de distinto origen, encontrándose en algunos de ellos restos de crustáceos y moluscos del litoral atlántico bonaerense y en otros, vestigios de esos mismos animales que pertenecen al sur de Brasil y a la costa atlántica uruguaya.

A través de un complejo mecanismo de regulación interna de agua y sales en el que intervienen diversas glándulas y hormonas, sin trastornos se adapta para el pasaje de un medio de agua salada o salobre a otro de agua dulce, y viceversa.

También es de considerar la facilidad de adaptación del organismo de estos peces a las grandes profundidades que implican naturalmente grandes presiones.

El Mimoso, Bonito o simplemente Bagre de mar es denominado por la ciencia Tachysurus barbus, pertenece al grupo de los Silúridos y como tal tiene su cuerpo tosco y poco estético.

El color de la piel del Mimoso es gris intenso en la región dorsal y siguiendo con los patrones del medio acuático (*), se va aclarando en los flancos hasta quedar definidamente blanco en el vientre.

La cabeza es fuerte y ligeramente deprimida. En ella se destacan dos ojos pequeños adaptados para la visión en aguas turbias y con poca luz. La boca presenta dientes viliformes dispuestos a modo de placas que los pescadores conocen con el nombre vulgar de "raspadillas". En la periferia bucal se distinguen cortos y gruesos barbillones maxilares y mentonianos que cumplen por medio de células especializadas funciones táctiles y gustativas.

Ocho aletas se asocian con una musculatura caudal muy compacta para conformar el aparato locomotor.Dos aletas pectorales y una dorsal munidas de un rayo rígido y aguzado en su extremo libre que se conocen vernacularmente como "chuzas" o "púas". Además presenta dos aletas ventrales, una caudal de gruesos lóbulos, una anal y una adiposa, todas ellas de rayos flexibles.

Su régimen de alimentación es muy variado. Tiene preferencia por los moluscos (calamares, caracoles, almejas, etc), crustáceos como cangrejos, camarones y langostinos y peces forrajeros con especial predilección por las sardinas.

Estos peces pueden alcanzar grandes dimensiones. Se conoce de registros de ejemplares que han sobrepasado el metro de longitud y los dieciocho kilogramos de peso, pero la mano depredadora del hombre y la falta de criterio a la hora de los reglamentos, vedas y límites, han propiciado que un Mimoso de ocho kilos sea considerado como "uno de los grandes".

En primavera es frecuente ver en distintos lugares del delta y del Río de la Plata pequeños barcos pesqueros capturando indiscriminadamente cientos de bagres de mar.

El hábitat ideal para el Mimoso, como ya fue mencionado, es todo ambiente de aguas profundas. Los pozones del río Paraná Guazú y los canales de la isla Martín García en los que la profundidad es de alrededor de cincuenta pies (un poco mas de dieciséis metros) son pesqueros ideales para intentar la captura de esta especie.

Debe tomarse en cuenta que casi siempre se alimenta cuando el río se halla en creciente y que como en el caso de muchos otros peces, el veril del canal el sitio óptimo para su pesca.

Al cierre de ésta edición la captura de los mismos está muy interesante sobre el canal Buenos Aires frente a Martín García con ejemplares de 6 a 8 kilogramos de peso.

Las aguas del Plata se van templando paulatinamente a medida que los días pasan. Es casi primavera y los primeros piques de Bogas desplazan a las corridas del Pejerrey en la prioridad del pescador.

Lentamente, nutridos cardúmenes de Bagres de mar, recorren grandes distancias en la búsqueda de profundos pozones y canales que a modo de circunstanciales hogares de temporada constituyen un ámbito ideal para la reproducción, dado que como otras especies, son peces marinos de penetración fluvial.

La ruta de migración de estos bagres que provienen del mar, no está aún bien definida. Analizando el contenido estomacal de muchas piezas pescadas al principio de la temporada, se ha podido comprobar que el alimento predigerido hallado en su aparato digestivo, es de distinto origen, encontrándose en algunos de ellos restos de crustáceos y moluscos del litoral atlántico bonaerense y en otros, vestigios de esos mismos animales que pertenecen al sur de Brasil y a la costa atlántica uruguaya.

A través de un complejo mecanismo de regulación interna de agua y sales en el que intervienen diversas glándulas y hormonas, sin trastornos se adapta para el pasaje de un medio de agua salada o salobre a otro de agua dulce, y viceversa.

También es de considerar la facilidad de adaptación del organismo de estos peces a las grandes profundidades que implican naturalmente grandes presiones.

El Mimoso, Bonito o simplemente Bagre de mar es denominado por la ciencia Tachysurus barbus, pertenece al grupo de los Silúridos y como tal tiene su cuerpo tosco y poco estético.

El color de la piel del Mimoso es gris intenso en la región dorsal y siguiendo con los patrones del medio acuático (*), se va aclarando en los flancos hasta quedar definidamente blanco en el vientre.

La cabeza es fuerte y ligeramente deprimida. En ella se destacan dos ojos pequeños adaptados para la visión en aguas turbias y con poca luz. La boca presenta dientes viliformes dispuestos a modo de placas que los pescadores conocen con el nombre vulgar de "raspadillas". En la periferia bucal se distinguen cortos y gruesos barbillones maxilares y mentonianos que cumplen por medio de células especializadas funciones táctiles y gustativas.

Ocho aletas se asocian con una musculatura caudal muy compacta para conformar el aparato locomotor.Dos aletas pectorales y una dorsal munidas de un rayo rígido y aguzado en su extremo libre que se conocen vernacularmente como "chuzas" o "púas". Además presenta dos aletas ventrales, una caudal de gruesos lóbulos, una anal y una adiposa, todas ellas de rayos flexibles.

Su régimen de alimentación es muy variado. Tiene preferencia por los moluscos (calamares, caracoles, almejas, etc), crustáceos como cangrejos, camarones y langostinos y peces forrajeros con especial predilección por las sardinas.

Estos peces pueden alcanzar grandes dimensiones. Se conoce de registros de ejemplares que han sobrepasado el metro de longitud y los dieciocho kilogramos de peso, pero la mano depredadora del hombre y la falta de criterio a la hora de los reglamentos, vedas y límites, han propiciado que un Mimoso de ocho kilos sea considerado como "uno de los grandes".

En primavera es frecuente ver en distintos lugares del delta y del Río de la Plata pequeños barcos pesqueros capturando indiscriminadamente cientos de bagres de mar.

El hábitat ideal para el Mimoso, como ya fue mencionado, es todo ambiente de aguas profundas. Los pozones del río Paraná Guazú y los canales de la isla Martín García en los que la profundidad es de alrededor de cincuenta pies (un poco mas de dieciséis metros) son pesqueros ideales para intentar la captura de esta especie.

Debe tomarse en cuenta que casi siempre se alimenta cuando el río se halla en creciente y que como en el caso de muchos otros peces, el veril del canal el sitio óptimo para su pesca.

Al cierre de ésta edición la captura de los mismos está muy interesante sobre el canal Buenos Aires frente a Martín García con ejemplares de 6 a 8 kilogramos de peso.

(*) muchas veces citaremos el concepto de "patrones del medio acuático", en este caso nos hemos referido casi a la totalidad de las especies relacionadas con el agua. Tienen el dorso oscuro para mimetizarse con el fondo para confundir el ataque de depredadores que provengan "desde arriba" y el vientre claro para lograr el mismo efecto con la claridad del cielo para entorpecer la agresión del atacante que provenga "desde abajo".

De Victor

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