Munición CBC calibre 7,62 x 51 mm

Siguiendo con los informes sobre municiones encamisadas, ahora tomaremos una munición de uso para armas largas.

Uno de los calibres más conocidos y usados para usos bélicos, policiales, deportivos y con fines cinegéticos es el calibre .308 Winchester o también conocido como 7,62 x 51.

Para uso militar ya cumplió funciones en casi todo el mundo, asimismo lo hizo en muchas agencias policiales no solo de Norteamérica sino que en Europa también, en nuestro país hubo provisión de fusiles del tipo F.A.L. a varias policías hasta principios de los años 90, luego fueron retirados, de la misma manera pero con fines deportivos hoy en día es uno de los más usados, y valga la aclaración, uno de los más baratos en su costo si nos ponemos a pensar en el valor de la cartuchería de la mayoría de los calibres, por otra parte, por su versatilidad es el elegido por la mayoría de los cazadores de la fauna mediana en virtud de una buena balística terminal.

Creo no equivocarme, en decir que debe ser uno de los calibres de armas largas, en los que más variedad de diferentes tipos, pesos y formatos de puntas se han fabricado.

Cuando decimos .308 Winchester es el nombre comercial del cartucho militar 7.62 × 51 mm NATO. Dos años antes de la adopción del calibre 7.62 × 51 mm, por la OTAN (1954), la firma norteamericana Winchester, (una subsidiaria de la "Olin Corporation"), introduce el cartucho .308 Winchester para los rifles modelo 70 y modelo 88.

Mucho más podemos hablar al respecto del tema, pero ya está bastante conocido sus orígenes, modelos y tipos de armas que lo disparan, es por ello que después de ésta breve introducción, profundizaremos sobre la munición en cuestión.

La firma Brasileña C.B.C., ya en el año 2006 celebró 80 años de vida, produciendo municiones de la mayoría de los usados en el mundo.

Ahora vamos a probar la munición de ésta firma, en el calibre 7,62 x 51 mm, (.308 Win), testeado con un fusil de 24 pulgadas de largo, esta punta de 150 grains (9,72 gramos), una velocidad inicial de 860 metros por segundo (2820 pies por segundo), de los cuales mantiene una velocidad de 807 metros por segundo (2661 pies por segundo), a 100 yardas (91,44 metros); con una energía en boca de 3596 Julios (2643 pies libras), conservando 3168 Julios de energía, (2338 pies libras), a 100 yardas. Generando no más de 52.000 psi en la recámara, y con un proyectil con una velocidad rotacional en la boca del cañón a 169.180 revoluciones por minuto.

Es sabido que para un proyectil de éste peso, en este calibre, se recomienda el uso de un cañón que presente una vuelta de paso de hélice en 12 pulgadas.

Pruebas balísticas

Para las pruebas se usaron dos armas, una un fusil de la firma nacional FM, modelo F.S.L. y un fusil con acción Mauser, caño Cocchi de 24 pulgadas de largo. Como primera medida comencé a probar sus sellamientos, para lo cual comencé una serie de pruebas de tormentos similares a las realizadas a otras municiones.

Entre las pruebas de tormento que fueron sometidos estos cartuchos cabe mencionar en primera instancia que se los fue separando de dos en dos. A dos cartuchos se le aplicó temperatura en un medio acuoso a mas de 100º Centígrados durante 30 minutos, previo a la realización de disparos.

A otros dos se los congelo durante siete días.

A otros dos se los dejo siete días enterrados en barro.

A otros dos se los dejo siete días en una solución de agua con sal durante siete días.

Resultados de su funcionamiento

De los dos cartuchos congelados:
Su funcionamiento fue normal

De los dos cartuchos con agua con sal:
Su funcionamiento fue normal

De los dos cartuchos que se le aplica temperatura en un medio acuoso:
Su funcionamiento fue normal

De los dos cartuchos en agua con barro:
Su funcionamiento fue normal

Al respecto de la alimentación en las armas que se usaron, ya sea en la del tipo semiauto o en la de cerrojo, las mismas funcionaron perfectamente en todas las oportunidades.

Tomando en cuenta los parámetros de velocidad y energía del calibre, poco se podía colocar adelante sin que sea vulnerado, por ende solo me avoque a colocar una chapa de hierro de 10 mm, de espesor a 150 metros, usando un fusil del tipo F.S.L. en cinco oportunidades lo atravesó sin inconvenientes, presentando bordes evertidos en ambos sentidos, del material constitutivo de la chapa, producto esto de la alta velocidad.

Posteriormente en otra jornada se realizaron disparos con un fusil con acción Mauser, y un caño Cocchi de 24 pulgadas de largo. Las velocidades del cronógrafo fueron las siguientes:

- 1º disparo: 2800 pies por segundo (853,44 mts por segundo)
- 2º disparo: 2804 pies por segundo (854,6592 mts por segundo)
- 3º disparo: 2802 pies por segundo (854,0496 mts por segundo)
- 4º disparo: 2800 pies por segundo (853,44 mts por segundo)
- 5º disparo: 2790 pies por segundo (850,392 mts por segundo)

Conclusión final

Al momento de las presentes pruebas, la munición se ha comportado dentro de los parámetros establecidos y con satisfactorios resultados.

Vale mencionar el hecho de que a aquellos que gustan del tiro con este calibre, (uno de los más baratos por suerte), tienen otra alternativa no tan onerosa en lo económico, al momento de elegir que munición comprar para realizar sus actividades deportivas o cinegéticas.

Espero que el presente informe sea de su agrado y les haya sido de utilidad, los saluda muy atentamente.

* Mis agradecimientos al Tiro Federal de Bahía Blanca; y muy especialmente a Armando Hernández y Sergio González por el uso de sus armas.