CERRAR

Armas

El plomeo de las escopetas

La distribución de los perdigones a determinada distancia

Autor: Podymski José

Fecha publicación: 22/03/2003

A la hora de seleccionar el cartucho ideal para la caza de las distintas especies de nuestra fauna local o para las prácticas de las diferentes disciplinas deportivas, es necesario conocer como plomea o dispersa los perdigones nuestra escopeta.

Se entiende como plomeo a la distribución de los perdigones a determinada distancia que por lo general es a 35 metros de distancia del tirador.

Es muy común que cartuchos de diferentes marcas pero con igual carga de perdigones y pólvora, no se comporten de igual manera disparados desde un mismo cañón. Recordemos que cuando en la caja de cartuchos o en la misma vaina está expresada una cifra en gramos, ésta no se refiere a la cantidad de pólvora que contiene cada cartucho, sino al peso de la carga de perdigones.

Hago esta aclaración que parece muy obvia, pero es muy común que la gente nos consulte creyendo que dicha cifra hace referencia a la cantidad de pólvora. Tengamos en cuenta que a mayor carga de perdigones, mayor será la potencia y alcance del cartucho.

En el alcance y dispersión de los perdigones juega un papel muy importante el diseño y forma del taco contenedor de perdigones, donde cada fabricante adopta aquel que mejor resultado ha dado en las pruebas de tiro.

Por esto es muy importante hacer la comprobación del plomeo de cada cañón. Un factor predominante en la distribución de los perdigones sobre el blanco de pruebas es el tipo de choque y su medida. Les recuerdo que se denomina choque a la reducción del último tramo del cañón necesario para comprimir los perdigones aumentando su alcance efectivo.

Recordemos que un cañón que posee un choque muy cerrado, denominado Full, con una reducción de 1 metro aproximadamente, tiene mucho más alcance y un plomeo más cerrado que uno cilíndrico.

Si tomamos como ejemplo a una escopeta del calibre 12-70, la medida interna del cañón, también conocida como barrenado, es constante en toda su longitud con un diámetro promedio de 18,3 mm. Un cañón con esta medida interna y con un choque cilíndrico daría un buen plomeo a una distancia de 25 metros pudiendo llegar a los 40 metros si el choque es el denominado Full.

Estos alcances se encuentran sujetos no solo al choque sino también a la carga y tamaño de los perdigones. El largo total del cañón no es muy significativo ni en el alcance de los perdigones ni en su distribución, presentando una mayor velocidad inicial aquellos cañones más largos. Siempre es más importante una buena construcción que su longitud.

Otro factor importante en el alcance y plomeo lo da el taco concentrador como comentaba anteriormente. El correcto pulido del cañón hará que el taco se dezlice correctamente impulsando la carga de perdigones con un correcto sellado de los gases que a la vez de proteger a las municiones de las altas temperaturas que produce la pólvora al quemarse, posee un amortiguador debajo de la carga para evitar el aplastamiento de la misma.

Un buen taco no deforma los perdigones abriéndose correctamente una vez que abandona el cañón permitiendo despegarse de las municiones permitiendo que éstas sigan el camino hacia el blanco.

La calidad de los perdigones es muy importante, ya que por su forma totalmente esférica y por presentar un escaso coeficiente balístico (por su diseño), si estos están deformados, la dispersión de los mismos llamada "rosa" no va a ser uniforme ya que puede presentar zonas en blanco por donde se podrá escapar la presa o el platillo.

Con esto quiero explicar que cuando dentro del cartucho encontramos perdigones deformados o de diferente diámetro, estos se van a ir desprendiendo de la nube de perdigones en su avance hacia el blanco teniendo un menor alcance y a su vez deformando la "rosa".

Por todo esto es muy importante comprobar el plomeo de cada cañón para asegurar una exitosa salida de caza o romper la mayor cantidad posible de platos.

Para los que se recargan sus propios cartuchos, con las sucesivas pruebas se llega al cartucho ideal, pero hay que tener presente un detalle muy importante que es la correcta confección del cierre. Muchos tiradores hacen incapié en la presión sobre la carga de pólvora, pero un cierre estrella mal hecho dará un quemado incorrecto de la pólvora lo que se traduce en una dispersión incorrecta de los perdigones.

Un cierre está mal hecho cuando los gajos del mismo no están perpendiculares al eje del cartucho y se puede notar que se levantan se su posición. Un cartucho en estas condiciones presentará un tiro errático.

Como comprobar el plomeo

En el mercado es posible encontrar blancos para este fin, pero de no conseguirlos los preparamos de una manera muy fácil. Este blanco consiste en trazar un círculo de 75 cm de diámetro sobre una cartulina o papel apropiado, se marca el centro como punto de referencia para tomar puntería y a la vez trazamos 2 líneas: una horizontal y la otra vertical, dividiendo el círculo en 4 partes iguales.

Colocado este blanco a 35 metros de distancia, se le disparará solo una vez con cada cañón y cada tipo de cartucho que vayamos a utilizar. De esta forma se puede comprobar como agrupa cada cañón a esa distancia y nos vamos a llevar más de una sorpresa, ya que no todos los blancos van a ser perfectos como nos gustaría.

De esta manera y gastando blancos vamos a encontrar la carga adecuada para nuestras escopetas. Recuerde que el tiro tiene que ser efectuado con un buen apoyo para asegurarse que en todos los casos sea efectuado de igual manera.

Y si encuentra que uno de sus cañones no agrupa correctamente y no posee choques variables, la solución es buscar la carga adecuada probando las marcas existentes del mercado. El resto lo van a hacer la práctica.

Podymski José

Artículos publicados por el mismo autor: