La Narcoideologización de la Política

"Muchos jueces son incorruptibles, nadie puede inducirlos a hacer justicia". Bertolt Brecht, dramaturgo y poeta

Se dice, y posiblemente con razón, que donde no hay justicia necesariamente habrá violencia. En la Argentina, desde hace varias décadas y cada vez más en aumento, no tenemos nada, no solamente justicia, tampoco proyecto de país y todo lo que eso trae aparejado: economía, salud pública, educación pública, seguridad interior, defensa nacional y dirigentes políticos preparados para esas dichas funciones públicas. Lo que sí tenemos en cantidad como para exportar son elementos corruptos que por la imbecilidad popular han sido elegidos para representarnos. Todos ya sabemos, a partir de Gustav Le Bon, que la masa no piensa, por eso menos mal que se entra a votar solo. Lo grave es que nuestra llamada clase dirigente no tiene la mínima preparación para los temas importantes del Estado y encima ellos hacen la personal. Son hombres pequeños, les interesa el comercio, tenderos diría Nietzsche. Hay muy pocos funcionarios que han sido triunfadores en sus actividades privadas o poseedores de mucho dinero antes de ser nombrados en el Estado. Algunas personas con mayor preparación que la media creen que ya estamos transitando el tiempo de descuento. De cualquier manera no será inmediato, el pueblo deberá sufrir para que pueda hacer llegar el escarmiento del cual hablaba Perón en décadas pasadas. El que era un hombre inteligente lo advertía: que cuando los pueblos agotan la paciencia suelen hacer tronar el escarmiento. Quizás para llegar a eso necesitamos dolor, mucho dolor. Con el paso del tiempo aumenta el odio. El odio es necesario para producir los grandes cambios. Esa llamada clase dirigente tiene impunidad y se siente superior por los cargos, amistades y dinero. Poca cabeza, impunidad y dinero es una fórmula que sirve solamente si se está vivo. Hay otras reglas de juego que prevén eso y que seguramente se irán incorporando a la vida nacional. Cada vez más la gente común piensa que la muerte puede ser el principio de la solución nacional.

Argentina continúa hacia la desintegración nacional. Como no tenemos identidad nacional (hemos venido del barco de Europa, según los dichos de nuestro Presidente) miramos para otro lado, justificamos lo injustificable, queremos quedarnos con algo antes de que esto estalle, no me dejes afuera, somos vigilantes sin gorra; en fin, toda la miseria humana que tenemos los argentos. La clase política actual, ya sea oficialismo u oposición, tiene un pensamiento descartable. No hay proyecto nacional desde las primeras décadas del siglo XX, entonces con liberalismo o populismo no hay salida, no con esta gente y estas reglas de juego. Vamos camino a la dominación extranjera visible y formal. La Argentina dividida en cuatro partes y el enemigo extranjero la quiere, en lo posible sin habitantes nativos. El éxito de Perón fue un proyecto nacional que se origino en un sector del Ejército Argentino (EA) que comenzó en 1920 y él fue el hombre elegido para llevarlo adelante. En ese entonces, el EA era el Poder. Y Perón lo representó a ese Poder. En 1951 el enemigo inglés, a través de los traidores locales, la mayoría de ellos de un siglo atrás, abrió una brecha en el Ejército Argentino y se produjo la sublevación militar fallida contra el orden constitucional. Al no ser aplicado un escarmiento por parte del Pte. Perón el enemigo lo volvió a intentar con éxito en 1955. Se podría decir que con la oligarquía nativa arrugó. El era militar de teoría, de escritorio. La violencia lo aterraba. No obstante, el famoso enemigo interno, el más peligroso para el país aún lo seguimos disimulando. Pero el enemigo sigue trabajando. Está entre con nosotros. A partir de allí empezó a despedirse el peronismo como cosa real y quedó en la memoria histórica lo que había logrado. Cuando ya volvió en la década del setenta, el general vino a morir y nadie lo ayudó ni lo entendió. El enemigo manejó los dos bandos en pugna y allí se terminó la soberanía nacional. Éste siempre comprendió a Perón y su potencial, lo que podía llegar a realizar aún con sus miserias humanas. Cuando en los años ochenta vuelve la democracia, a raíz del fracaso del autollamado Proceso de Reorganización Nacional, ya el peronismo fue utilizado para el curro argento. Cualquiera creía que tenía en su mochila el bastón de mariscal y de allí surgió parte de lo peorcito de la politiquería nacional. El resto eran los otros partidos, que siempre se supo eran el enemigo de lo nacional: La oligarquía y los que obedecían a intereses extranjeros. El llamado peronismo de la actualidad está postergando el estallido social para que no les ocurra a ellos porque se llevaría puesto al populismo y se terminaría la forma de ganar elecciones con las fotos del general, Evita y la marcha peronista. Y la oposición hace todo lo posible para que el estallido social les ocurra a los KK. Se sabe que si está el pueblo delante de los tanques de guerra es no solamente una señal de hartazgo sino de revolución nacional. Pueblo y Ejército. Si por el contrario, la gente va detrás de los tanques es un golpe de estado. Es simplemente una forma de decir, porque fuerzas armadas no tenemos más. La oligarquía aprendió que esa modalidad ya no va más: se logra mucho más y sin sangre en forma directa con empresas y Medios masivos de desinformación. La sangre fluye lo mismo pero en forma indirecta podríamos decir. Salpica menos. Es una forma de dominación sin asustar, porque hay que tener en cuenta a la tilinguería porteña. En su momento Raúl Scalabrini Ortiz nos advertía así: "La prensa argentina es el arma más eficaz de la dominación británica. Es un arma traidora como el estilete, que hiere sin dejar huella".

Los jóvenes, con el ejemplo que le hemos dado los mayores, han conseguido trabajo, seguramente no es el que muchos padres desearían pero es un trabajo al fin. Peor es ser un eterno planero, ya que le compran la dignidad por unos pesos, y terminan siendo una cosa, un objeto con algunos dientes. La alternativa para ellos parece ser: EL NARCOTRÁFICO. La droga sirve, en parte, para mantener el sistema financiero capitalista y acelerar la muerte de los débiles consumidores. Desde hace años estos consumidores han aumentado en muy considerable cantidad. Parece ser una necesidad y en algunos lugares sería peor el resultado si la misma faltara. A través de los esfuerzos se busca llegar a un consumo controlado en los países importantes. No alcanza más la religión judeocristiana ni los discursos sobre la conveniencia del sistema electoralista llamado democracia, ni el mercado. En fin, se está en un estado de descomposición en el que la aceleración de los tiempos no sólo es consecuencia de la tecnología sino también de la decadencia ideológica masiva.

En nuestro país vemos que cada vez más los jóvenes trabajan para los Cárteles de las drogas, ya sea como elementos de seguridad, denominados por la prensa como soldaditos, vendedores y así sigue la cadena. Con el plan y algo que se venda se sobrevive. La esperanza que genera ese trabajo es la inmediatez del éxito: dinero y reconocimiento. Consumo gratis o a bajo costo. No hay mucho riesgo, los hombres que manejan el Estado necesitan que la población esté entretenida con la droga y de paso ellos se hacen millonarios. Muy poca o nula represión invita a integrar esos grupos de acción. Ese nivel de violencia de la ciudad de Rosario realmente es para asustar a los giles de la clase media. Cualquier persona que conozca de combate sabe que eso se puede resolver, a más tardar, en treinta días. Por supuesto que con otra conducción política de la Seguridad. La columna vertebral se rompe con Contrainteligencia, el resto es verso. En este caso el enemigo del Estado nacional es interno. Si no, probemos contratar a grupos extranjeros que se especializan en ese tipo de limpieza. La corrupción y la inseguridad existen porque hay impunidad. El delito es institucional en Argentina y todo lo que dependa de la dirigencia política actual actúa como enemigo de la población. De muestra basta un botón, en realidad dos, con sólo ver quiénes son los hombres encargados de la seguridad de la nación y de la provincia más poblada del país; la garantía la da el narco no el Estado. Un cuenta poroto y un enfermero sin antecedentes en la materia y sin la conducta apropiada para el tema Seguridad. Nos toman el pelo. El hombre que es conocido como Narco daría la impresión que es un hombre sencillo. Ya están incursionando en variados negocios, amplían la red y cada vez más gente trabaja para ellos. Además ayudan a la gente que son sus vecinos. Éstos se encuentran conformes, será porque no están sindicalizados. Al no haber Moyanos, esto le juega a favor a la gente. Su contabilidad no tiene muchos libros, no hay lugar para discrepancias, ni siquiera malos entendidos. Si no está el dinero, tiene que estar la merca; si no está ninguno de los dos, el castigo es uno sólo: la muerte. A veces se extiende hacia el resto de los seres queridos como para dar el ejemplo para el resto de los empleados y a los no empleados. Esta metodología no es nueva, otros grupos de poder la emplean y desde hace siglos, sólo que sin tanta promoción. En todas las muertes de esos existe un ritual, el tema pasa por conocer el mismo. Contrariamente, no se entiende. Por supuesto que a quienes va dirigido el mensaje generalmente sí entienden. Eso se llama Poder. Nada más que éstos no tienen el rótulo de malvivientes, son mucho más eficaces pero con un nombre decente para que no asuste a la gilada. Como buen simulador, el mediocre le da mucha importancia a las formas. Pero lo importante es el resultado definitivo: la muerte. Escarmiento total. Es una forma de limpieza. Históricamente en el siglo XX cuando se puso fulera la cosa la dirigencia política se escapó. Algunos murieron en el intento. Los marxistas inundaron occidente pidiendo refugio, y eso que se decían combatientes. Se dice que el MIR chileno había prohibido a sus combatientes irse al exilio. ¡Qué diferencia! Vergonzoso pero real. Desde siempre el argento buscó un plan B . Soldado que huye sirve para otra guerra. La del chamuyo. Un país de empanadas y vino, choripan y birra. La vida pública en Argentina es prácticamente toda mentira. Educados en dos siglos de una mentira tras otra: la religión oficial, la historia, las instituciones, las estadísticas, los hombres y mujeres públicos, los bienes declarados y varios etcéteras más. Por eso el enemigo trabaja casi en la superficie. No existe un país con tantos bribones como en nuestra argenta. Napoleón Bonaparte había dicho: "¿Qué es la historia? Una sencilla fábula que todos aceptamos". Aunque hubo un pensador nacional como José María Rosa que afirmó: "La Historia falsificada es un muro de piedra interpuesto entre nosotros y el pasado argentina".

Schopenhauer sostuvo que "la personalidad del hombre determina por anticipado la medida de su posible fortuna." Miremos a nuestros dirigentes. No podrían, si es por mérito, tener más que un autito usado. En cambio, en el mundo narco no hay tantas mentiras. Plata o plomo. Uno de los lemas más difundidos por la prensa. La violencia como fin no como medio. Eso es una debilidad estratégica. Vacío de ideas. Trabajan y cobran. Todo el mundo detrás del dinero y especialmente el dinero narco. Como bien señalaba Voltaire: "Cuando se trata de dinero todos son de la misma religión". Entiéndase políticos, funcionarios, abogados, jueces, fiscales, policías, hombres de organismos de seguridad, hombres religiosos, donde participan supuestamente de la represión hacia esa actividad. Todos queriendo una parte del efectivo de esos hombres narcos. El imperio del dinero y la violencia viene a suplir la escasez e inexistencia de las virtudes de la clase dirigente. Ya Oswald Spengler cuando escribió sobre la decadencia de Occidente afirmaba "El dinero piensa; el dinero dirige: tal es el estado de las culturas decadentes".

Posiblemente a la gente dedicada al narcotráfico se les abra una línea de negocios que también deja dinero, quizás no como las drogas, pero dinero al fin y es la venta de armamento. Armas portátiles... por ahora. Todos los serviles al Nuevo Orden Mundial, que es el imperialismo de moda, buscan desarmar a la población civil. En definitiva, son corruptos y antipatrias pero no tan tontos; intuyen que esas armas van a ser las que terminen con sus miserables vidas. El delito no les preocupa tanto, no solamente porque los delincuentes son sus votantes sino porque no representan un peligro para ellos. El real peligro para estos bandidos es la violencia social a diferencia de la violencia delictiva. Esta última solamente nos afecta a nosotros los giles. Por eso la existencia de la Red del Desarme y cuando se investiga quién está detrás de ellos se entiende el porqué no quieren ciudadanos armados y quiénes son los financistas de esas orga. Cuentan con la prensa cómplice ya que se hace difícil encontrar periodistas independientes. Cualquier tarado habla del tema armas y no tiene la menor idea de lo que eso representa. Libre portación gritan dos imbéciles que supuestamente son políticos y aspiran a puestos importantes. En las cosas vitales, la prensa tiene un discurso único. El enemigo de ellos es uno sólo: lo nacional. Pero como lo nacional de Jauretche, Scalabrini Ortiz y un puñado más de valientes no existe más, es como ir por una autopista... por ahora.

Dentro de las limitaciones a las armas, los autollamados peronistas también oficiaron de serviles al Imperio. El presidente liberal-peronista Carlos Saúl Méndez instauró el decreto 64/95 en el Registro Nacional de Armas como una alcahuetería al entonces presidente Bill Clinton, que en su presidencia quiso limitar los fusiles de asalto en su país. La colonia norteamericana argenta lo hizo. Primero los vendieron para sacárselos a Fabricaciones Militares (DGFM) por bajo precio para fundir la empresa y privatizarla.

Después los prohibieron y ahora existe la imposibilidad de transferirlos. Una estafa más del Estado a la población. La mayoría de los funcionarios que estuvieron a cargo de las armas en el Registro Nacional de Armas (ReNAr) y ahora siguen en la era K con la denominada Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC), como una forma de decir, ya que no conocían el tema ni de armas, menos de explosivos, ni de Seguridad Interior ni de Defensa Nacional. Por lo tanto lo único que cuidaron y cuidan son los kioscos del organismo. Cuarenta años de kioscos. Los radicales en 1983 inauguraron la corrupción en el organismo. Hay corruptos conocidos desde 1995, siempre en el mismo puesto. Y nadie dice nada. Pasan los directores y ellos quedan, especialmente un empleado que además es jubilado de otro organismo oficial. Las víctimas lo conocen con el nombre de guerra "puchero". Es el emblema de la corrupción y la impunidad. Los empleados del organismo lo tienen de referencia. Al no echarlo a él la señal es que la corrupción sigue. Es como un semáforo en verde. La tradicional ineficacia radical estuvo dos veces conduciendo en el organismo, varios han sido directores autodenominados peronistas y los que vinieron del macrismo. Estos últimos son conocidos no por ser abogados exitosos o conocedores del tema sino empleados llevando expedientes y escritos a Tribunales, no más que zapatos de suela de goma, ropa barata y perfume trucho. Llegaron al organismo por integrar organizaciones, es decir, tratando de sumar, haciendo curriculum político. Empleada de la ex Casa Tía, y bares de la zona de Tribunales. Popularmente se los denominó como la garza y el ganso, animalitos domésticos, ambos basura humana. Para decirlo en lenguaje K: soldadita y soldadito del ministro de injusticia macrista. En cuanto a ineficacia y corrupción, no existió diferencia con los directores de otros partidos políticos, salvo para ayudar a sus amigos. Mucha gente no sabe bien qué es la ANMaC antes ReNAr. La misión es registrar y controlar armas y explosivos. ¿Se entiende por qué está en manos de inútiles? La pregunta es: ¿a quién le sirve eso? Cuarenta años de curro. Todos ellos algún día tendrán que rendir cuentas. Un país limítrofe del nuestro estaría realizando algunas investigaciones muy serias y no descartan el interrogatorio a personal jerárquico de la ANMaC. La verdad se sabría si los extraditan. Inclusive los sindicalistas son muy mal vistos pero UPCN maneja mucho el organismo. La corrupción mata aunque no se sepa. Debe ser declarada delito de lesa humanidad por los efectos nefastos que produce. Aún no hay asociaciones de usuarios que sean serias y escuchadas. Algunas son presididas por hombres que tienen antecedentes como chantas de la política, que seguramente buscan un puesto o un nombramiento en las delegaciones provinciales del organismo. Son sellos de goma, no están inscriptas en la Inspección General de Justicia. El algunos casos el negocio de ellos es otro, no el de ocuparse de la defensa del ciudadano que tiene armas legales y debe recurrir a la corrupción o a gestores para la obtención de los trámites. Trámites que demoran meses, sin ningún justificativo, salvo para algunos ex empleados importantes que se lo entregan sin ningún costo extra en 24 horas. Hay que aclarar que estamos hablando de los giles que compran armas por derecha. Todo legal, por eso se reniega.

Asumió la presidencia del Brasil el sindicalista Lula, otro engaña pichanga sudaca del sistema. Lo primero que hizo fue un decreto por el tema de armas y hasta quiere cerrar los polígonos de tiro. Además de ser un soldado del Poder Mundial, también debe ser por el temor de que los ciudadanos honestos le maten a sus votantes. Saben que mañana esas armas serán utilizadas contra ellos y sus familias. Similar a la Argentina. Es cierto que los pobladores se pueden levantar y usar sus armas. Algunas de ellas son armas que pueden servir para el combate urbano. Las armas pueden ser útiles siempre y cuando detrás de ellas haya testículos u ovarios que se las aguanten. El general Giap había dicho que: "Las armas valen lo que vale el hombre que la empuña". Los explosivos son otra cosa. Se podría decir que en su uso pueden ser anónimos. Las policías son ineficaces en su gran mayoría y aún así los bandidos armados se entregan sin combatir. Pura pinta, hasta ahora guapos no vemos. Todo cartón pintado. Imagínese si hubiera una fuerza del Estado entrenada y libre de corruptos. En Argentina se mata más gente con autos que con armas de fuego, pero los carnet de conductor salen como luz mala. Las armas para las revoluciones muy rara vez se compran, generalmente se roban a los organismos del Estado o algunos grupos de poder extranjeros que proveen lo necesario y de esa forma comienza el canje. La provisión de la guerrilla argentina en los años setenta ha sido a través de las fuerzas armadas, de seguridad y policiales. La prohibición logra sembrar miedo en la gente y por supuesto activa y acelera el contrabando. Por los caminos de las drogas pueden transitar las armas y demás accesorios. El soborno a las Fuerzas es por contenedor o bultos, se supone que viene droga que es la que más les rinde. Entonces de esa manera el Estado desconoce lo que la población tiene y el próximo paso a comprar son… Además hacen mucho ruido. Pero todos sabemos que al no haber dirigentes esclarecidos y nacionales las armas seguirán en las casas de la gente o los delincuentes comunes las usarán como herramienta de trabajo.

A medida que los políticos nos siguen defraudando, el país avanza en línea recta a la anarquía y la clase media va camino a vivir en La Matanza, cuna de la ecología de la pobreza, y capital k. Creo que desde allí van a tener otra visión más realista de la situación. ¿Se imaginan a las señoras gordas como decía Jauretche? Es cierto que a los pobres se los maneja muy fácilmente en política, más aún cuando no tienen verdaderos líderes. Con los mamarrachos que los conducen jamás podrán manejarse para algo que no sea un plan. Gracias a ese nivel de pobreza los llamados dirigentes planeros pueden vivir como burgueses. Ya lo había anticipado Hemingway cuando sostuvo que la población de este subcontinente "es una raza que nació vencida". Aumento de la pobreza y el hambre, a lo que los latinos decían venter non habet aures (el vientre no tiene oídos), factor importante para que esto se termine de una buena vez. La violencia se hará cada vez más presente, quedando como evidencia la narcoideologización de la política. Son iguales en resultados. El más elemental de los empleados del narco puede vender o ser soldadito. Va a ir creciendo o no en el negocio hasta ser distribuidor o sicario. Por el otro lado, los funcionarios públicos que tienen responsabilidades y muchísimos de ellos son millonarios gracias a los trabajadores narco. Muchas de las campañas políticas se financian con dinero narco pero moralmente no hay diferencias. Se sigue tratando de disimular pero el narco, desde hace años, ya está en los puestos de conducción del Estado. ¿A dónde nos llevan? Ésa va a ser la sorpresa. Se le atribuye a Pablo Escobar la frase "somos todos bandidos".

El deterioro de la capacidad intelectual produce una caída estrepitosa en la correcta atención de los problemas. El filósofo Francis Bacon nos ilumina diciendo que "la moneda, como el estiércol, no es buena sino esparcida". Nada de eso ocurre, queda para la clase dirigente de los poderes del Estado. La gente ya no quiere trabajo. La mitad del país vive del Estado entre planes, jubilación y empleo público. Ya van intuyendo que esto bien no termina y luego se espera que venga la rendición de cuentas. Hubo un compatriota, que más allá de sus ideas políticas, tenía barba y usaba boina, y sentó un buen antecedente en esa materia. Fue en el exterior. Solamente le llevó cuarenta y ocho horas resolver la corrupción e ineptitud de los anteriores dirigentes de ese país. Utilizó un muy buen detergente: el 30-06 y en menor medida el 9 mm. Desde 1959 hasta la fecha no se presentaron más problemas importantes en ese país.

Lo más grave no es el narcotráfico, éste es un medio, sino la entrega de la soberanía nacional, la presencia de distintos grupos de poder manteniendo a nuestros políticos y sus políticas de desintegración para la entrega nacional. Vamos camino a perder el país tal cual lo conocemos. Hay un detalle que los especialistas advierten, hay más de uno en realidad, pero el que quiero destacar es el que se habla de la presencia de hombres de fuerzas militares extranjeras analizando el terreno y la situación social. Falta aún, pero estamos en el camino indicado para llegar a tal fin. Nietzsche sostuvo que: "las grandes personalidades aparecen sólo en épocas de peligro, violencia y despiadada necesidad". Allí aparecerá el líder emergente, y ante la cobardía e ineficiencia históricamente reiterada de los hombres de la política, no es de descartar que resulte una mujer. Por supuesto que no serán las conocidas de la política actual. Esas son parte del problema no de la solución.

"Quien no ha compartido la lucha, compartirá la derrota". Bertolt Brech